La generación del “slow content”: crece la preferencia por contenidos más auténticos y sin filtros en redes sociales
Menos filtros, más realidad: usuarios jóvenes están dejando atrás el contenido artificial y acelerado para dar paso a publicaciones más humanas, espontáneas y conscientes.
En tiempos de algoritmos que premian la inmediatez y la perfección, una nueva corriente está ganando fuerza: el slow content. Esta tendencia, impulsada principalmente por las generaciones más jóvenes, propone crear y consumir contenido digital de forma más pausada, honesta y reflexiva.
Publicaciones sin retoques, videos con silencios reales, textos que invitan a la introspección o a valorar lo cotidiano, son parte de esta nueva estética. Plataformas como TikTok e Instagram están viendo cómo los usuarios comienzan a privilegiar la conexión emocional por sobre el impacto visual.
No se trata de desconectarse de las redes, sino de reconectarse con uno mismo desde un uso más consciente y auténtico.
En un entorno donde todo pasa rápido, esta forma de comunicar busca que nos demos el permiso de frenar, mirar y compartir desde lo real. Una tendencia que, al parecer, llegó para quedarse.