Desde el Consejo Regional lo cuestionan por “las faltas de respeto constantes” hacia las mujeres que integran este cuerpo colegiado, con comentarios machistas e incluso “misoginia”. Además, desde la Municipalidad de Rancagua realizaron una presentación contra Arroyo en la Defensoría de la Niñez por presunta vulneración de los derechos de los niños y niñas.

Días complicados ha debido enfrentar el consejero regional (core) Lenin Arroyo. Primero, porque este miércoles, el alcalde de Rancagua, Juan Ramón Godoy, en compañía de los concejales Carlos Arellano y Cristian Toledo, realizaron una presentaron en la Defensoría de la Niñez -en contra del core Arroyo- por presunta vulneración de derechos de niños y niñas del albergue de emergencia de la Municipalidad de Rancagua.

Lo anterior, luego que Lenin Arroyo difundiera, a través de su cuenta de Twitter y a través de medios de comunicación, imágenes y registros audiovisuales de niños y niñas residentes del albergue de emergencia dispuesto por la Municipalidad de Rancagua, captados en las inmediaciones del recinto.

Dichos registros habrían sido obtenidos y posteriormente difundidos sin el consentimiento de sus padres, cuidadores o apoderados, y con la ausencia de asentimiento informado por parte de los niños y niñas.

Al respecto, el alcalde Juan Ramón Godoy explicó que “lo que nosotros creemos es que efectivamente puede haber una presunta vulneración de derechos de los niños y niñas del albergue. La Constitución Política lo establece en su artículo 19, hay una ley sobre garantías y protección de derechos del niño, y sobre todo porque aquí lo que se hace es sin consentimiento”.

“Lo que no puede pasar es que políticamente se utilice a niños y niñas para hacer una crítica, y eso es lo que hoy día junto a los concejales Arellano y Toledo estamos presentando en la Defensoría de la Niñez, porque acá no hay una acción periodística, hay una autoridad pública que está realizando estas acciones que presuntamente pueden vulnerar los derechos de los niños y niñas”, concluyó el alcalde Godoy.

Por su parte, el concejal Carlos Arellano, presidente de la Comisión de Infancia y Adolescencia del Concejo Municipal, expresó que “si hay algo que con el alcalde nos hemos propuesto es evitar, precisamente, vulneraciones sobre los niños”, agregando que “ningún agente del Estado ni ningún personero político tiene derecho  seguir vulnerando, además de la vulneración ya ejercida sobre ellos a través de lo que significaba vivir en la calle, ni exponer a estos niños y niñas a través de tomas de cámara en una situación que solo puede ser avalada con el consentimiento de ellos y de sus padres y madres”.

Finalmente, el concejal Cristian Toledo, manifestó que “hoy nos encontramos con este episodio, creo que no es lo que corresponde (…) esto fue un actuar político, lamentablemente”.

“Faltas de respeto constantes”

Pero además, un grupo de consejeras regional de O’Higgins alzaron la voz y se manifestaron en contra del Lenin Arroyo por lo que consideran “faltas de respeto contantes” de parte del consejero regional.

“Estamos todas acá reunidas el día de hoy, independientemente de nuestros colores políticos, mujeres de izquierda, derecha, independientes, hablando de lo que ha significado un problema constante dentro del Consejo Regional que tiene que ver con el machismo instalado, tiene que ver con la misoginia de la que hemos sido objeto, de las faltas de respeto constantes de parte de un consejero en particular, el consejero (Lenin) Arroyo”, señala la consejera regional Tamara Monroy, en entrevista con el diario local El Tipógrafo.

A su juicio, Arroyo “constantemente nos interpela como delincuentes, como personas que efectivamente somos payasas, pertenecemos a un circo, con un prontuario delictual, e incluso últimamente ha llegado más allá y tratar a una de nuestras colegas consejeras regionales como concubinas”.

“Nos parece que esto ya ha excedido toda norma. Nos parece que ninguna mujer, independientemente del rol que pueda desempeñar en la sociedad, pueda tildarse de esta manera peyorativa, tratándose de un apelativo de forma negativa”, aseguró Monroy.

“Sin duda este tipo de apelativos no solo nos daña como sociedad y sigue perpetuando la violencia de la que las mujeres somos objeto constantemente en la sociedad, sino que además dentro del Consejo Regional, se meten en la vida privada de una de nuestras colegas”, manifestó.