Durante horas de la tarde de ayer se desarrolló en el Cementerio General de Antofagasta el funeral de Byron Castillo, camionero de 25 años que fue asesinado el jueves pasado, presuntamente a manos de migrantes: fue un crimen que prácticamente paralizó a todo el norte grande.

El cuerpo había sido entregado el pasado sábado a la familia y fue velado en una cancha del sector, ubicada en la población La Portada. Finalmente, el cortejo fúnebre comenzó ayer cerca de las 11:00 horas de la mañana afuera de la casa del fallecido, cuyos restos fueron trasladados en un camión blanco hacia el cementerio general de la ciudad.

La carroza, que era trasladada en la parte trasera del camión que solía conducir, estuvo acompañada por una masiva caravana de vehículos ligeros y camiones, los que pasaron por el lugar del crimen, entre la Ruta B-400 con la Ruta 1 que une Antofagasta y Mejillones.

Con el paso de los minutos, la procesión llegó al cementerio en cuestión para darle el último adiós al joven que se ha convertido en el rostro y estandarte de las demandas de los camioneros, rubro que ha acusado constantemente que su trabajo no cuenta con las medidas de seguridad necesarias.

El nivel de público que llegó a las dependencias del camposanto era tal, que se generaron atochamientos en los pasillos del mismo. Incluso, personas de viviendas aledañas salieron a observar la ceremonia, mientras que otros treparon a los tejados para ser testigos de las exequias.

ATON Chile.